miércoles, 26 de octubre de 2016

Historia de vida: “Simplemente hay que seguir”. VISTO

Cada persona a lo largo de su vida atraviesa por momentos agradables, momentos difíciles, diferentes situaciones que marcan cada vida en particular.
En esta ocasión la protagonista de esta historia se llama Georgina Aires, única hija del matrimonio formado por María Moraes y Roberto Aires. Nacida el 15 de enero del año 1988, una mañana muy calurosa según su madre, en la ciudad de Posadas.
Tuvo una linda infancia, consentida por sus padres, que siempre fueron muy trabajadores y quienes le enseñaron buenos valores. A los 5 años empezó jardín de infantes en una guardería, allí se quedaba desde las 8 de la mañana hasta pasadas las 6 de la tarde, horario en que su mamá salía del trabajo.
Desde la primaria le gustaba mucho la materia matemática y fue una alumna muy aplicada. En su adolescencia le hizo renegar bastante a sus padres, pero nunca descuido sus estudios. A los 17 años se recibió en la Escuela de Comercio N* 6 Mariano Moreno en la orientación Economía y Gestión de las Organizaciones.
Siempre con ganas de salir adelante y orgullosa de sí misma por haber escuchado los consejos de su padre, que siempre le decía “nunca pongas un cigarrillo en la boca y cuidado con el alcohol, los vicios te llevan por mal camino”. Había aprendido a ser independiente y pensaba lo antes posible conseguir un empleo para ayudar a sus padres.
Al cumplir los 18 años comenzó a trabajar como cajera en un supermercado, ayudaba a sus padres y podía comprarse lo que deseaba. Se sentía bien, pero algo había quedado pendiente por hacer: estudiar la carrera de Contador Público que se había propuesto en la secundaria.
Entonces se preparó para rendir el ingreso, aprobó y tuvo que dejar de trabajar para dedicar su tiempo a los estudios. Pero no todo sale como planeamos siempre, las decepciones llegan; a pesar de varios intentos por aprobar la materia Algebra no lo pudo lograr, se decepcionó y abandonó la carrera.
Al poco tiempo volvió a conseguir trabajo, pero esta vez no con las mismas condiciones, ahora trabajaba más horas, pero cobraba menos. Entonces fue cuando se puso a pensar en estudiar una carrera más corta y se decidió por Periodismo General.
En el año 2009 comenzó a cursar en el Instituto Hernando Arias de Saavedra de su ciudad natal y fue allí que conoció a Fernando Gonzalez, quien es su esposo. A fines de ese mismo año, Georgina empezó a tener algunos problemas de salud que se iban agravando rápidamente; cada día se sentía más débil, pasaba la mayoría del tiempo en la cama con fiebre, vómitos, mareos, dolores en el cuerpo y sus salidas eran solo para hacerse análisis o atenderse en los sanatorios.
Los doctores se mostraban desconcertados y no encontraban una solución a ese problema de salud, le realizaban extracciones de sangre diariamente, hasta que descubrieron que un virus había ingresado a la sangre y estaba alterando por completo su organismo.
En ese momento gris de su vida la fe en Dios era su única esperanza, lo que la mantuvo en pie hasta que la respuesta desde lo alto llegó: el doctor le dijo: “no entiendo porque, pero tus estudios están todos normales, estás sana”. “Entonces descubrí que realmente Dios existe y nos escucha” dijo Georgina sonriendo.
Su vida continuó con momentos muy especiales: en el año 2010 se casó con Fernando y nació su primer hija Eunice, al año siguiente nació su segunda hija Giovanna; ellos son sus tres pilares.
Por la situación económica y la crianza de sus hijas tuvo que abandonar la carrera que estaba cursando por mucho tiempo, pero este año decidió retomar los estudios junto a su esposo, por lo cual se encuentra cursando el segundo año con muy buenas expectativas.
Para cerrar dice: “desde niña pase por muchas dificultades, no todo fue color de rosas como dice el dicho, pero son insignificantes frente a las cosas lindas que hay que resaltar”.

Esta historia de vida no es extraordinaria, es simple, pero Georgina con 28 años pudo experimentar muchas sensaciones; y de esto se trata la vida, de palpar cada momento sea bueno o sea malo, disfrutar, olvidar, aprender, enseñar y sobre todo seguir adelante.

Podés centrar tu historia en un hecho puntual, ejemplo, atravesar un díficil momento en tu salud y de allí partir. Porque la historia no es una biografía sino más bien algún hecho a destacar, algo que amerite estar en un diario.
Por Georgina Aires.

Breve historia de vida.VISTO-FALTA TITULO

Esta es la historia de vida de Fernando Gonzalez de 27 años nacido en la ciudad de posadas miembro de una familia numerosa, el cuarto de nueve hermanos, hijo de Mirian Acosta docente y Néstor Gonzalez chofer.
Fernando miembro de una familia humilde, desde pequeño fue aprendiendo los valores de la vida, el respeto, la responsabilidad, la constancia, la auto superación, el cuidado a los seres queridos, gracias al gran ejemplo de sus padres.
Pero al ver el ejemplo de dedicación de sus padres, quienes se casaron de jóvenes, su madre con 17 años, que a la edad de 35 con 5 hijos se recibió de docente y comenzó a ejercer hasta el momento; así también su padre con 27 años recién casado, trabajaba 15 horas por día y de noche edificaba su hogar. Fue así que siempre pensó que no hay dificultad para superarse y progresar en la vida.
A los 13 años Fernando empezó a changuear, mientras estudiaba el secundario en el instituto Santa Catalina que culminó a los 18 años y decidió seguir changueando para poder estudiar alguna carrera terciaria, algo que le gustaba mucho. Con esa edad sus padres estaban separados, su padre ya era dueño de dos camiones con los que trabajaba de forma independiente y su madre seguía ejerciendo su docencia.
A los 19 años comenzó a estudiar periodismo deportivo en el Instituto Superior Hernando Arias de Saavedra, fue en esa institución donde conoció a su esposa Georgina “la compañera perfecta” dice Fernando, con quien se casó a la edad de 20 años y tiene dos niñas una de 6 años y la más chica por cumplir 5 años. Por motivos económicos tuvieron que abandonar la carrera finalizado el 1er año.
Ese mismo año Fernando comenzó a trabajar de chofer para la delegación municipal, luego en comercio, y siempre tenía en mente junto con su esposa culminar la carrera de periodismo. A la edad de 23 años realizó sus papeles para ingresar a la escuela de agentes de la policía provincial, pero debido a la gran demanda de postulantes se hacía muy difícil que lo llamaran, entonces pensando siempre en superarse, estudiar y dar lo mejor a su familia decidió renunciar a su trabajo de comercio donde tenía un salario muy bajo, no le autorizaban estudiar, y no tenía tiempo de hacer nada más por el horario del mismo.
Desde ese momento con una familia que mantener y una meta en la cual quería llegar, decidió realizar todo tipo de alimentos como, empandas, pastelitos, pastaflora, y salir a vender casa por casa, así gracias a Dios mantenía a su familia y ganaba más dinero que en el comercio, también tenía tiempo para ir todos los días durante 6 meses al ISFOTEP, la escuela de agentes, para hablar con el director y así pedir una oportunidad. En todas esas veces el director no le recibía por distintos motivos, hasta que llego el día del ingreso y Fernando seguía yendo para pedir una oportunidad solo con su presencia ya que no le permitían hablar con ningún superior.
Así llego el gran día, un martes por la tarde cuando Fernando le espero al subcrio. Director de la escuela en la calle, donde al pasar éste le saludo, entonces Fernando se acercó y con pocas palabras le pregunto si había un lugar para él, lo cual el subcomisario le respondió: “vení el viernes y vemos” y allí fue donde Dios le ilumino e ingreso a la escuela. Luego de 1 año de estudio se recibió en técnico auxiliar en seguridad e higiene.

Actualmente se encuentra prestando servicios en la policía provincial y logro retomar en segundo año la carrera de Periodismo junto con su esposa, dice Fernando: “no hay meta por más difícil que sea que no se pueda alcanzar, de rodillas ante Dios y de pie ante los problemas”.

En todas las hitorias hay que centrar en un hecho puntual, no se trata de una biografía, sino en la Historia que consideres se puede publicar en un medio gráfico. Buscar el qué de nuestra historia. 
Por Fernando Gonzalez.

miércoles, 12 de octubre de 2016

Gran fin de semana del Automovilismo en Pista en Posadas.

Se realizó la octava fecha del Campeonato Misionero este fin de semana en el Autodromo Rosamonte, con una buena concurrencia de espectadores y aficionados.

Cada categoría ofreció un espectáculo único.

El parque de pilotos superó las expectativas con alrededor de 50 inscriptos, ya que hubo varios debutantes y retornos como el del ex campeón Jorge Baez y de Carlos Codermatz.
El domingo tuvo el plato fuerte que comenzó a las 10 horas con las carreras 1 de cada una de las categorías, y a las 14 horas las segundas carreras con la grilla invertida.
En las vibrantes carreras con roses y maniobras ajustadas se pudo ver que el público disfrutó a pleno cada uno de los espectáculos brindados.
La octava fecha del Pista por el GP “50 Aniversario del Automóvil Club Misiones” tuvo como ganadores a Abente y Huta (Copa Fiat 1.4), Erracaborde (Clase 1), Benitez (TC4000 Misionero) y Pastori y Garavano (Clase 2).
Por otra parte, también tuvo lugar la exhibición de adeptos de las históricas carreras del TC Nordeste, el club del Falcón, Fiat 600, Gol, Chevrolet, Ford, Torino que dieron una vuelta simbólica recordando que son parte de la historia del automovilismo misionero.
La última fecha del Campeonato Misionero de Automovilismo en Pista se disputará el 5 y 6 de noviembre en el Autódromo de la Ciudad de Oberá.

Exhibieron los autos históricos de misiones.

Por Gonzalez Fernando.

Comenzó la estudiantina 2016 en Posadas.

Este fin de semana empezó la clásica fiesta de los estudiantes en el cuarto tramo de la Costanera, con un clima bastante fresco.

                                            Mucho color y brillo en la noche posadeña. 

 En la tarde-noche del sábado arrancó la primera jornada con una hora de retraso debido a un corte de luz en ese sector de la ciudad, también el jurado llegó un poco tarde, pero esta situación no apagó la energía y la buena onda de los participantes.
la EPET N°1, mejor conocida como la Industrial, fue el primer colegio que presentó su show, ante un importante público. Los demás colegios también se hicieron presentes en medio de mucho colorido, diferentes ritmos y elaboradas coreografías.
Las hinchadas acompañaron a cada uno de los colegios y se hicieron sentir con fuerza, utilizando pancartas, banderas, gritos y cantos, también se acercaron personas mayores que vinieron con sillones y mate en mano para presenciar el show.
Un fuerte operativo policial acompañó a los estudiantes en su fiesta, el acceso principal a la costanera fue por la calle Bolivar, ya que los otros accesos estaban vallados por seguridad.
El domingo el clima también se prestó para el festejo y desde las 18:00 horas se podía observar el movimiento de plumas, lentejuelas, cajitas, redoblantes y chanchas que hicieron que vuelva a brillar la noche posadeña.

                                                    Las carrosas se lucieron con sus reyes.
Por: Georgina Aires

Voraz incendio consumió una vivienda en Posadas.


Intentando apagar el incendio.
 Esta mañana una casa fue devorada por el fuego en el barrio Luis piedra buena, alrededor de las 8:30 de la mañana una vecina dio aviso a los bomberos del humo que salía desde el techo de la vivienda.
Al llegar las dotaciones de bomberos de San Isidro el fuego ya había avanzado y no pudieron impedir que se propague por toda la casa, la cual era de madera. Afortunadamente no había personas adentro, la pareja con sus tres hijos, ya no se encontraban en el lugar.
Un familiar aviso a los dueños de casa, quienes rápidamente acudieron, pero lastimosamente no pudieron rescatar sus pertenencias, solo pudieron pararse en frente y observar su desgracia.
Aparentemente un cortocircuito fue la causa del incendio, según la señora Denisa Avalos quien habitaba allí “solo había dejado enchufada la heladera”, por este motivo habrá que esperar el informe de los peritos para saber con exactitud lo que ocurrió.
La familia afectada está conformada por dos cabos de la Policía provincial de Misiones, Matías Brítez, su pareja Denisa Avalos con sus tres hijos, una niña de 9 años y dos varones de tres y un año, quienes se quedaron con lo puesto.
Una de las vecinas del barrio describió el momento en que llegó la señora Denisa al lugar "verla a la mujer bajar del auto corriendo, casi gateando y pararse en frente de su casa llorando desconsolada, me partió el corazón", describió apuntando a la desesperación de la damnificada.
También a través de las redes sociales pidió la colaboración de las personas “lo que puedan dar, algo que por ahí lo tengan guardado o en desuso en su casa, algún alimento o ropa” para ayudar a ella y a su familia".



Por: GeorginaAires